Hace unas semanas, cuando me dirigía hacia el cuarto de baño me encontré de pronto con un desconocido.
Un sujeto sonriente y tranquilo, cuyo rostro desbordaba alegría, una persona completa, en cuya imagen se reflejaban a las personas que le quieren y que estaban a su lado, dándole su apoyo; una persona con muchos amigos, una familia y una amorosa pareja... Una persona plena en todos los aspectos.
De inmediato reaccioné, me dio rabia el verle tan alegre y tan lleno de vida y lo único que se me ocurrió hacer fue pedirle de la manera mas atenta que se marchara y que no quería volver a verle.
Desde ese día no he vuelto a tener un encuentro con ese extraño sujeto, desde entonces es solo mi reflejo lo que veo cuando miro al espejo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario